¿Autónomo o sociedad limitada? ¿Qué es lo mejor para empezar mi empresa?

 

¿Difícil decisión, verdad? Pero no te preocupes, vamos a intentar solucionarte todas las dudas con respecto a cómo empezar, que es lo más económico y que te conviene más.

No te puedes imaginar las de veces que hemos resuelto esta duda a nuestros clientes. La respuesta depende de los factores económicos, tu situación personal y el enfoque comercial de tu futura empresa o actividad.

Empecemos, pero antes…
Este artículo será un poco largo, ya que queremos transmitirte todo el conocimiento que podamos y resolverte todas las dudas.

Autónomo o SL ¿Qué interesa para pagar menos?

Empecemos con las ventajas y las desventajas de empezar como autónomo o Sociedad Limitada.

Ser autónomo:

1. Tienes responsabilidad ilimitada: Esto quiere decir, que responderás con tu patrimonio personal a frente las deudas con terceros.
2. Alta como autónomo: Los costes de tramitación y constitución para su alta como autónomo es más económico. También el proceso de alta es más sencillo, por lo cual es más rápido su tramitación. Puedes estar dado de alta como autónomo en el mismo día.
3. Costes de gestión de un autónomo: Los costes por mantener la actividad mes a mes, es más económico. También el gobierno saca ayudas para los nuevos emprendedores como las tarifas planas, donde en el primer año, la cuota se queda entre unos 60€ y en el segundo año disfrutas del 50% y el 30%. También las gestorías fiscales y contables suelen cobrar mucho menos por la contabilidad de un autónomo, ya que sus trámites suelen ser mucho más sencillos.
4. Capital inicial para ser autónomo: Aquí no hay un capital definido. Simplemente, puedes tener tu cuenta bancaria con el dinero que tú consideres.
5. Impuestos de un autónomo: El autónomo tributa por el IRPF, que es un impuesto progresivo. Por ello, tendrás buenos beneficios al principio.
6. Financiación para los autónomos: Si es verdad, que si te acercas a una identidad bancaria a solicitar un préstamo o una financiación para arrancar tu negocio, te van a poner mas problemas y te ofrecerán comisiones más altas. Ya que el autónomo se considera como una persona física (Un particular) y te pedirán abales para realizarlo.
7. Imagen comercial del autónomo: Al ser un autónomo, desde el punto de vista cómo proveedor de servicios o vendedor de productos, si es verdad que da una imagen de ser una micro empresa, por lo cual, no da mucha confianza a algunos proveedores o clientes más grandes. Si ves que vas a tener grandes clientes por una prestación de servicios, sería mejor que montases una sociedad limitada.

Montar una Sociedad Limitada:

1. La responsabilidad es limitada: Esto quiere decir que solo responderás con el patrimonio que tenga la S.L. Tus bienes personales no entran aquí en juego.
2. Constituir una Sociedad limitada: Es más caro el alta. Los tramites son más complejos y suelen tardar en estar constituida entre 5 y 30 días laborables.
3. Costes de gestión de una Sociedad Limitada: Sus costes son más caros a frente el autónomo. Los tramites de una S.L son más complejos, por lo cual, las gestorías y asesorías cobrarán una cuota más alta por su gestión mensual. Aunque también dispones de una tarifa plana del primer año de 85€, es decir, el resultado de aplicar la reducción del 80% sobre la cotización por contingencias comunes.
4. Capital inicial para la S.L: Aquí si es necesario tener un capital determinado en una cuenta bancaria. Los mínimos son de 3000€ aunque ahora con la nueva ley, será de 1€. Pero tendrás que tener en tu posesión el certificado o resguardo de tu banco que certifique que ese depósito está realizado. Pero no te preocupes, podrás disponer del capital, en cuanto tengas la sociedad constituida.
5. Impuestos de una S.L: A las sociedades le corresponden el Impuesto de Sociedades, que es un impuesto con tipos fijos, en concreto del 25%. Esto te vendrá bien, si parte de tus beneficios los dejarás como patrimonio en la sociedad limitada. Si en cambio decides llevarte casi todos los beneficios, tendrás que hacerlo mediante tu nómina y al tributar te saldrá más o menos igual que ser un autónomo.
6. Acceso a financiación bancaria: Si es verdad, que como las sociedades limitadas tienen las cuentas muy transparentes, los bancos están más seguros para ofrecer sus préstamos e incluso dependiendo del capital que tenga la S.L, podrán ofrecerte mejores condiciones.
7. Imagen comercial: Si es verdad, que las sociedades dan una mejor imagen de cara a proveedores y clientes. Es como ser una empresa más solvente. Pero hoy en día no lo tenemos tanto en cuenta. Hace unos años, si se fijaban más en este punto.

Ahora queremos mostrarte de una forma más amplia, los problemas de ser autónomo o sociedad limitada.

Los problemas de ser una sociedad limitada

Un problema común al ser una sociedad limitada es la responsabilidad financiera limitada de los socios. Esto significa que, en caso de que la empresa tenga deudas o problemas financieros, los socios solo son responsables hasta el monto de su inversión en la empresa. Esto puede ser beneficioso para los socios, ya que protege su patrimonio personal de cualquier problema financiero de la empresa. Sin embargo, esto también puede ser un problema, ya que los acreedores de la empresa pueden tener dificultades para recuperar su dinero en caso de que la empresa no pueda pagar sus deudas.
Otro problema común al ser una sociedad limitada es la dificultad para atraer inversores o financiación externa. Debido a que los socios solo son responsables hasta el monto de su inversión, los inversores pueden considerar que el riesgo de invertir en una sociedad limitada es mayor que en otras estructuras empresariales.
Además, puede ser más difícil transferir o vender una participación en una sociedad limitada, ya que esto requiere el consentimiento de los demás socios y puede ser más complicado que en otras estructuras empresariales.
Es importante tener en cuenta que cada empresa es única y que cada estructura tiene sus propias ventajas y desventajas. Si estás considerando establecer una sociedad limitada, es recomendable consultar con un abogado o asesor financiero para obtener más información y determinar si esta estructura es adecuada para tu empresa.

Los problemas de ser un autónomo

Ser un autónomo tiene algunos problemas y desafíos únicos. Algunos de los problemas más comunes son:

1. Incertidumbre financiera: Al ser autónomo, no tienes la seguridad de un salario fijo, por lo que puede ser más difícil predecir tus ingresos y hacer planes a largo plazo.
2. Falta de beneficios laborales: Al no estar empleado por una empresa, no tienes acceso a beneficios laborales como seguro médico, vacaciones pagadas y licencia por enfermedad.
3. Responsabilidad financiera: Al ser autónomo, eres responsable de todos tus propios gastos, incluyendo el seguro médico, el seguro de responsabilidad y el seguro de vida.
4. Falta de estabilidad laboral: Al no tener un contrato de trabajo a largo plazo, puede ser más difícil predecir cuánto trabajo tendrás en el futuro y puedes enfrentar largos períodos de inactividad.
5. Dificultades para acceder a préstamos: Al no tener un salario fijo, puede ser más difícil obtener un préstamo o hipoteca, ya que los prestamistas suelen considerar a los autónomos como un riesgo mayor.

Es importante tener en cuenta que, a pesar de estos problemas, ser autónomo también puede tener muchas ventajas, como la flexibilidad y la libertad de elegir tu propio trabajo y horario. Si estás considerando convertirte en autónomo, es recomendable evaluar tus necesidades y objetivos y determinar si esta opción es adecuada para ti.

Empieza cómo autónomo mejor

Esta opción es la más aconsejable para los emprendedores que están iniciando su negocio o actividad de nuevas. Así puedes probar tu idea de negocio sin costes tan elevados y puedes destinar parte del presupuesto a captar nuevos clientes.

¿Cuándo cambio de autónomo a Sociedad Limitada?

Esta es una muy buena pregunta. Existen varias razones por las que un autónomo puede considerar cambiar a una sociedad limitada. Algunas de las razones más comunes son:

 

• • Mayor estabilidad financiera: Al ser una sociedad limitada, puedes atraer inversores y obtener financiación externa, lo que puede proporcionar una mayor estabilidad financiera a tu empresa.
  • Mayor capacidad de crecimiento: Al tener más recursos financieros a tu disposición, puedes expandir tu empresa y tomar mayores riesgos de inversión.
  • Responsabilidad financiera limitada: Al ser una sociedad limitada, solo eres responsable hasta el monto de tu inversión en la empresa, lo que puede proteger tu patrimonio personal en caso de problemas financieros de la empresa.
  • Mayor credibilidad: Al tener una estructura empresarial más formal, puedes ganar credibilidad ante tus clientes y proveedores.

 

Es importante tener en cuenta que cambiar de autónomo a sociedad limitada no es una decisión que debas tomar a la ligera. Debes considerar cuidadosamente tus objetivos y necesidades y evaluar si esta estructura es adecuada para tu empresa. Si decides hacer este cambio, es devido a que estás teniendo unos ingresos constantes en el tiempo y ya tu empresa es solvente y en proceso de crecimiento. Es recomendable consultar con un abogado o asesor fiscal para obtener ayuda con el proceso y asegurarte de cumplir con todos los requisitos legales.

 

¿Qué pasos hay que seguir para pasar de autónomo a SL?

Si quieres hacer todo por tu cuenta sin contar con un asesor fiscal, te damos algunos consejos. Para cambiar de autónomo a sociedad limitada (SL), debes tener en cuenta los siguientes pasos:

 

• • 1. Elige el tipo de sociedad limitada que deseas crear. Hay dos tipos principales: la Sociedad Limitada Nueva Empresa (SLNE) y la Sociedad Limitada Unipersonal (SLU). La SLNE es adecuada para empresas nuevas que todavía no han comenzado a operar, mientras que la SLU es adecuada para autónomos que deseen convertirse en sociedad limitada sin necesidad de crear una empresa nueva.
    2. Elige el nombre de tu empresa. Debes elegir un nombre que cumpla con todos los requisitos legales y que no esté ya registrado por otra empresa. Esto se realiza en el registro mercantil.
    3. Redacta los estatutos de la empresa. Los estatutos son el documento que establece los términos y condiciones de la empresa, incluyendo la estructura de propiedad, los derechos y obligaciones de los socios y la forma en que se tomarán las decisiones. Debes redactar los estatutos con la ayuda de un abogado para asegurarte de que cumplen con todos los requisitos legales.
    4. Realiza el trámite de constitución de la empresa. Una vez que hayas redactado los estatutos, debes presentarlos junto con todos los demás documentos necesarios (como el certificado de nombre de la empresa y el certificado de no tener deudas con la Seguridad Social) en el registro mercantil.
    5. Inscríbete en el régimen de autónomos. Una vez que tu empresa esté constituida, debes darte de alta como autónomo y pagar las cotizaciones a la Seguridad Social.

 

Es importante tener en cuenta que el proceso de cambio de autónomo a sociedad limitada puede ser complejo y requerir la ayuda de profesionales como asesores, gestores o asesores fiscales. Es recomendable obtener asesoramiento experto para asegurarte de cumplir con todos los requisitos legales y evitar problemas en el futuro o penalizaciones.

 

<h2>¿Quién debe ser autónomo en una sociedad limitada? </h2>

En una sociedad limitada, todos los socios pueden ser autónomos si así lo desean. Los socios de una sociedad limitada pueden ser personas físicas o jurídicas y pueden participar en la gestión de la empresa o limitarse a aportar capital y recibir una parte de los beneficios generados por la empresa.

Los socios autónomos de una sociedad limitada tienen la responsabilidad de gestionar la empresa y tomar las decisiones necesarias para su funcionamiento. Los socios autónomos también son responsables de las deudas de la empresa, aunque en el caso de una sociedad limitada, la responsabilidad de los socios está limitada a la cantidad de capital que hayan aportado a la empresa.

Es importante tener en cuenta que, si un socio de una sociedad limitada es autónomo, debe cumplir con todas las obligaciones fiscales y laborales que correspondan a un trabajador autónomo, como la obligación de pagar la seguridad social y los impuestos correspondientes.

En resumen, cualquier socio de una sociedad limitada puede ser autónomo si así lo desea, pero debe cumplir con todas las obligaciones fiscales y laborales que correspondan a un trabajador autónomo.

 

Cómo localizar un Punto PAE, para constituir la Sociedad

Un Punto de Atención al Emprendedor (PAE) es un lugar donde puedes obtener información y asesoramiento sobre cómo constituir una sociedad. Los PAE suelen ser oficinas gubernamentales o instituciones públicas que brindan asesoramiento a emprendedores y pequeños empresarios. Algunos PAE también ofrecen servicios de tramitación y ayuda para la creación de empresas.

Para localizar un Punto de Atención al Emprendedor en tu área, puedes hacer lo siguiente:

 

• • • Busca en Google: Muchos gobiernos tienen páginas web donde puedes encontrar información sobre los PAE disponibles en tu área. Busca en el sitio web del gobierno de tu país o región, o en el sitio web de una agencia gubernamental que se dedique a la promoción de emprendimiento o el apoyo a pequeñas empresas.
    • Pregunta a tu banco o a una asociación de empresarios local: Muchas veces, los bancos y las asociaciones de empresarios tienen información sobre los PAE disponibles en tu área y pueden brindar asesoramiento sobre cómo constituir una sociedad.
    • Pregunta a un asesor o gestor: Si tienes un abogado o un contador que te asesora, ellos pueden tener información sobre los PAE disponibles en tu área y pueden brindarte asesoramiento sobre cómo constituir una sociedad.

 

Es importante que tengas en cuenta que cada país o región puede tener sus propias leyes y requisitos para la creación de una sociedad. Por lo tanto, es importante que busques información específica para tu ubicación y que te asegures de cumplir con todos los requisitos necesarios.

 

¿Cuáles son los costes de una asesoría?

Esta pregunta, seguro que te está rondando por la cabeza ahora mismo. Los costes de una asesoría pueden variar ampliamente y depender de diversos factores, como el tipo de asesoría que necesites, la experiencia y el nivel de especialización del asesor, la ubicación geográfica y el tiempo que se dedique al trabajo. Algunos asesores cobran por hora, mientras que otros pueden cobrar un precio fijo por el servicio completo.

Es importante que te informes bien sobre los precios de las asesorías antes de contratar a un asesor. Pregunta a varios asesores para comparar sus precios y asegúrate de que entiendas qué servicios están incluidos en el precio. También es recomendable pedir referencias y verificar la reputación del asesor antes de contratarlo.

En general, es importante recordar que a menudo vale la pena invertir en una buena asesoría, ya que puede ayudarte a ahorrar tiempo y dinero a largo plazo. Sin embargo, también es importante ser realista y asegurarte de que puedes permitirte pagar por los servicios de un asesor. Si no puedes hacerlo, es posible que tengas que buscar alternativas más asequibles o hacer el trabajo por tu cuenta y exponerte a penalizaciones. Nosotros te recomendamos que inviertas en un buen asesor fiscal y contable para estar asegurado y tranquilo.

 

Cuáles son los costes de la seguridad social

Los costes de la seguridad social varían según el país y la región en el que te encuentres. En general, la seguridad social es un sistema que protege a las personas mediante el pago de beneficios en caso de enfermedad, jubilación, desempleo, etc. Los costes de la seguridad social suelen ser compartidos entre el empleador y el empleado, y pueden incluir cotizaciones a la seguridad social, impuestos sobre la nómina y otras contribuciones. En España es del 30% del sueldo del trabajador.

En algunos países, los costes de la seguridad social son muy altos y pueden representar una gran parte del salario de un trabajador. En otros países, los costes son más bajos y pueden ser asumidos principalmente por el empleador. Es importante tener en cuenta que los costes de la seguridad social pueden variar según la edad, el género, el nivel de salario y otros factores.

Es importante que te informes bien sobre los costes de la seguridad social en tu país o región, ya que pueden afectar a tu salario y a tu capacidad para hacer frente a los costes de la vida. Si tienes un empleo, es importante que entiendas cómo funciona la seguridad social y cómo se aplican los costes a tu salario. Si eres empresario, es importante que sepas cómo calcular y pagar las cotizaciones a la seguridad social para tus empleados.

 

Que impuestos hay en España para autónomos y SL

Hablemos de un tema puntiagudo. Nuestros amigos los impuestos en España. En España, los autónomos y las sociedades limitadas (SL) están sujetos a diversos impuestos, que pueden incluir:

 

• • • 1. Impuesto sobre la renta de las personas físicas (IRPF): Este impuesto se aplica a la renta obtenida por los autónomos y se calcula en función de sus ingresos y sus circunstancias personales.
      2. Impuesto sobre el valor añadido (IVA): Este impuesto se aplica a la venta de bienes y servicios y se calcula como un porcentaje del precio de venta. Las empresas, incluyendo a los autónomos y a las SL, deben facturar el IVA a sus clientes y luego declarar y pagar el IVA que hayan cobrado.
      3. Impuesto sobre sociedades (IS): Este impuesto se aplica a las ganancias obtenidas por las sociedades, incluyendo a las SL. El IS se calcula en función de las ganancias obtenidas por la empresa y se aplica a una tasa fija del 25%.
      4. Impuesto sobre el patrimonio: Este impuesto se aplica a los bienes y activos de las personas y empresas, incluyendo a los autónomos y a las SL. El impuesto sobre el patrimonio se calcula en función del valor del patrimonio y se aplica a una tasa fija del 0,2% para patrimonios inferiores a 2.000.000 de euros y del 0,3% para patrimonios superiores a 2.000.000 de euros.

 

Es importante tener en cuenta que estos son solo algunos de los impuestos que pueden aplicarse a los autónomos y a las SL en España. Existen otros impuestos y tributos que pueden aplicarse según el tipo de actividad o negocio que realice la empresa. Es importante que te informes bien sobre los impuestos aplicables a tu situación y que te asegures de cumplir con tus obligaciones fiscales.

 

<h2> ¿Para que sirven los impuestos en España? </h2>

En España, los impuestos son una fuente importante de financiación para el gobierno y se utilizan para financiar servicios públicos como la educación, la salud y la seguridad. Hay diferentes tipos de impuestos en España, incluyendo impuestos sobre la renta, impuestos sobre el patrimonio, impuestos sobre el consumo y impuestos sobre la propiedad.

El impuesto sobre la renta de las personas físicas (IRPF) es uno de los impuestos más importantes en España y se aplica a la renta obtenida por las personas físicas. El impuesto sobre el patrimonio es otro impuesto importante en España y se aplica a la propiedad que una persona tiene, incluyendo bienes inmuebles, acciones y otros activos financieros.
Los impuestos sobre el consumo, como el impuesto sobre el valor añadido (IVA), se aplican a la compra de bienes y servicios. Los impuestos sobre la propiedad, como el impuesto sobre bienes inmuebles (IBI), se aplican a la propiedad de una propiedad inmueble.

En resumen, los impuestos en España son una fuente importante de financiación para el gobierno y se utilizan para financiar servicios públicos esenciales. Hay diferentes tipos de impuestos en España, incluyendo impuestos sobre la renta, el patrimonio, el consumo y la propiedad. Todo esto se consigue sostener con nuestro tejido empresarial de autónomos y sociedades limitadas. Son el 90% de nuestra red de la economía en nuestro páis.

 

Consúltanos para ayudarte en estos trámites. Nuestra asesora fiscal te asesorará.